El rapero y empresario Sean “Diddy” Combs fue declarado inocente de los cargos de tráfico sexual y crimen organizado, pero el tribunal lo encontró culpable de un delito menor relacionado con la prostitución, en una sentencia que ha generado reacciones divididas en la opinión pública y el mundo del espectáculo.
Tras semanas de audiencias en una corte federal de Nueva York, el jurado concluyó que no había pruebas suficientes para sostener las acusaciones más graves en contra del productor musical, que incluían presuntas redes de explotación sexual y vínculos con estructuras criminales.
Sin embargo, el tribunal sí halló evidencia creíble de que Combs incurrió en promover o facilitar actos de prostitución, lo que representa un delito menor bajo la legislación local.
La defensa celebra, pero sigue la controversia
Los abogados del artista celebraron la resolución como una “victoria significativa” al haberse desestimado los cargos más serios. “Nuestro cliente siempre sostuvo su inocencia frente a acusaciones exageradas y sin fundamento”, declaró su defensa al salir de la corte.
Por su parte, activistas y grupos que apoyaban a las presuntas víctimas expresaron su descontento. “Este veredicto envía un mensaje peligroso a quienes han sufrido abusos detrás del poder y la fama”, expresó un vocero de la organización Justice Now.
¿Qué sigue para Diddy?
El veredicto no implica prisión inmediata, pero sí podría implicar sanciones económicas, medidas legales adicionales o restricciones en su actividad profesional, dependiendo de la sentencia que se dará a conocer en las próximas semanas.
Combs no ha ofrecido declaraciones directas tras la audiencia, pero su equipo legal aseguró que continuará trabajando para limpiar su imagen y evitar que este caso afecte su carrera y negocios.